La creciente urbanización, la motorización y el crecimiento rápido de los ingresos en China están abriendo enormes oportunidades para las economías locales, pero al mismo tiempo, los retos asociados con el crecimiento de muchas ciudades chinas se están multiplicando. En Beijing, el sector transporte por sí solo representa el 26 por ciento de las emisiones totales de dióxido de carbono de la ciudad, y se espera que sea el de más rápido crecimiento de fuente de gases de efecto invernadero en los próximos diez años. La congestión creciente del tráfico también implica altos costos económicos: Beijing pierde un estimado de $ 1.6 mil millones de dólares al año, más que cualquier otra ciudad china. Con el fin de frenar la congestión y abordar los problemas de calidad del aire, los líderes de la ciudad dieron a conocer un conjunto de políticas para reducir las emisiones de los vehículos y la contaminación industrial en su Plan de Acción de Aire limpio de los próximos cinco años (2013-2017), enumerando el transporte urbano como una prioridad.
Limpiando el aire en las ciudades de China
En el 2014, FedEx y EMBARQ ampliaron el proyecto MAP en China para ayudar a los líderes de la ciudad a cumplir estos objetivos. EMBARQ China está trabajando para aumentar la capacidad en el gobierno municipal de Beijing y contribuir a los esfuerzos de varios departamentos para reducir la contaminación del aire por el sector transporte, y de gases de efecto invernadero. El Taller Internacional de Transporte Sustentable de Lucha contra la Contaminación del Aire (organizado por la Comisión Municipal de Beijing del Transporte (BMCT) y EMBARQ China, patrocinado por FedEx) dio inicio este trabajo en agosto de 2014.
